¿Qué pasa cuando un calamar y una berenjena se conocen?

Hay días en los que piensas que vas a cocinar, si los ingredientes casan, si los sabores combinan…Y hay veces, que simplemente intentas salvar una cena en la que no habías pensado y para la que tienes un par de ingredientes que jamás te hubieras planteado juntar.

Eso es lo que me pasó a mí. Llegó un día en el que tenía que gastar un par de berenjenas enanas y no tenía nada más en la nevera que unos calamares y una cebolla. De repente pensé: ‘¿qué hago con esto?’. Mi mente se iluminó, me dio la solución y aquí tenéis el resultado: Berenjenas enanas rellenas y calamares a la plancha.

Berenjenas enanas rellenas y calamares a la plancha

Igredientes para 2 personas:
6 calamares pequeños (sin patas)
2 miniberenjenas1 Cebolla
Aceite
Pimienta
Sal

Precalienta el horno a 200ºC.

Corta la parte superior de la berenjena, y resérbala, porque luego te servirá de tapa.

Vacía las berenjenas con una cuchara, con cuidado de no romperlas, y reserva la carne interior para el relleno.

Pon una sartén al fuego con un chorrito de aceite y pocha la cebolla picadita. Cuando esté traslúcida, añade la carne de la berenjena también picada, salpimenta y saltea durante unos minutos.

Rellena las berenjenas con la mezcla y coloca de forma vertical en una fuente. Tápalas con su propia capucha y hornea durante 30 minutos solo por abajo y 10 minutos más arriba y abajo.

Justo antes de servir prepara los calamares a la plancha a fuego fuerte, para evitar que queden duros (en unos tres minutitos los tienes).

A la hora de montar el plato, como las berenjenas no se mantienen derechas, las puedes poner tumbaditas y jugar estéticamente con la tapa.

Recomendaciones: solo utilicé las capuchas de los calamares, porque en su día cuando los compré, gasté las patitas para hacer un arroz.