Un tarrito lleno de amor

Hoy os presento una receta con muchísimo amor, la mermelada de fresa que se ha convertido en el regalo de mi boda este sábado.
Cuando decidí hacerla pensé: 'madre mía donde me he metido', pero cuando vi todos los botecitos preparados, sentí una gran ilusión.
Y este sábado, cuando los entregaba a la familia y amigos, al ver su cara de sorpresa, estaba que me salía.
Fue un día maravilloso y espero que quede en el recuerdo de todos ellos como lo va a quedar en el mío y en el de Víctor.
¡Si es que en el fondo soy una romántica!

Mermelada de fresa

Ingredientes para 1 kg de mermelada:
750 gr de fresas
500 gr de azúcar
6 cucharadas de agar-agar
1 limón


Lava las fresas, córtales el rabo y trocéalas. Ponlas en una cazuela a macerar con el zumo del limón durante una media hora. Después añade el azúcar y remueve hasta que se disuleva bien. Ponlas al fuego y remueve de vez en cuando hasta que veas que la fruta esta un poco blandita (15 minutos). Añade el agar-agar, remueve bien y deja que cueza otros 5 minutos.
Luego solo tienes que envasar. Puedes utilizar botes de conserva reciclados. En mi caso los compré para que todos fueran iguales. Tanto si el bote es nuevo como si no, pon una olla con agua al fuego y cuando hierva, mete los botes y las tapas, y déjalos unos 5 minutos.
Una vez los botes están secos, rellénalos al máximo, ciérralos y pon al baño maría 20 minutos más.
Cuando estén bien fríos, ya los puedes guardar y consumir cuando quieras. Se pueden guardar un año siempre y cuando los mantengas en un sitio fresco y oscuro.


¡Espero que os guste!